19 septiembre 2019
Los inmuebles se degradan con los años. Diseño, decoración, estructura y terminaciones quedan desfasados con el paso del tiempo. No obstante, si trabajamos en el mantenimiento de nuestra vivienda, podremos revalorizarla y competir en el mercado inmobiliario con promociones más actuales. La clave está en mantener actualizados los siguientes aspectos de nuestra propiedad:
Decoración
Adaptarnos a las tendencias que el momento dicte permitirá a nuestra vivienda estar siempre al día y ser siempre comercializable a un valor superior del que tendría con una decoración desfasada.
No se trata de cambiar de mobiliario cada pocos años sino de actualizar elementos básicos de la vivienda como, por ejemplo, el gotelé o las moquetas, ya anticuados. Actualizar estos aspectos de nuestro hogar e incluso adaptar su distribución puede ayudarnos en caso de querer vender nuestra vivienda. Actualmente, el mercado se decanta por propiedades neutras y que den aspecto de amplitud, trabajar en esta línea sería positivo para revalorizar nuestro inmueble.
Aspectos valorables por un posible cliente serían, también, el estado de las puertas, de la cocina o de los baños. En estos tres puntos es donde, en la mayoría de los casos, se desembolsa el grueso del presupuesto destinado a reformas. Reemplazar sobre todo cocina y baños es algo costoso por lo que, si los mantenemos actualizados, siempre aportaremos valor al inmueble a pesar de su edad.
Mantenimiento de la vivienda
Este punto es aún más importante que el anterior. Si bien es cierto que una bonita decoración hace más sencilla una venta, el comprador busca, cada vez más, que la propiedad cumpla con unos requisitos mínimos de mantenimiento.
La sustitución de tuberías antiguas o la renovación del sistema eléctrico es algo valorado muy positivamente pues, pese a que nuestra vivienda tenga décadas de antigüedad, estas mejoras consiguen, en la medida de lo posible, ponerla al día.
En este sentido, también debemos mantener en óptimo estado zonas como las azoteas, terrazas o fachadas, susceptibles de deteriorarse por las inclemencias del tiempo. Un correcto mantenimiento nos garantizará, además, un ahorro en averías a largo plazo.
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Sostenibilidad
Cada vez son más los propietarios que persiguen que su nueva vivienda sea energéticamente sostenible por lo que el reemplazo de una máquina de aire acondicionado por otra más eficiente y ecológica o la sustitución de luminarias convencionales por otras de bajo consumo son acciones que el posible cliente valorará positivamente.
Sin duda, en este sentido, la instalación de placas solares, o de equipos de ósmosis (tan de moda en la actualidad), se convertirán en un plus que colocará a nuestra vivienda por delante de otras similares a la venta.
En este punto mencionaremos también como importante el reemplazo de los cierres de la vivienda por unos que garanticen el aislamiento térmico y sonoro. De esta forma, el propietario ahorrará dinero y energía en enfriar o calentar la vivienda además de garantizarle mayor calidad de vida al evitarle molestos ruidos del exterior.
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